LOS OTROS POEMAS

Paul Legault

¿Hay una libertad en la forma? Es decir, ¿podemos ser libres (e incluso más libres) cuando asumimos las restricciones de una forma? Los otros poemas de Paul Legault nos dicen que sí, y lo hacen de manera gozosa y rotunda.

A partir de la disposición —firme y, a la vez, casi fantasmal— del soneto, estos poemas se despliegan en conversaciones imposibles, fragmentos de teatro absurdo y gags poéticos. En ellos oiremos la voz de amantes, de amigos, de carniceros, de madres, de zafiros, de orangutanes, de gabardinas pequeñas y de un sinfín de seres animados e inanimados. Entonado por tantos acentos, el poema se abre a la seducción, la sorpresa y el humor, sin contradicciones. Porque Legault también responde con un sí rotundo a la pregunta “¿puede hacer reír un buen poema?”.

Un libro tan inesperado exige una traducción que lo iguale, que se deje llevar por su alegría sin pretender replicarla. Así ha hecho Berta García Faet, en un ejercicio inusual de escucha atenta y de hospitalidad poética. En un libro recorrido por los diálogos, el de Paul y Berta es sin duda el más sostenido y el más bello.

«¿O no? Cada uno de los setenta y cinco tensos y deslumbrantes sonetos de Paul Legault comienza con una copla críptica, sigue con un diálogo de cuatro versos, cuyas voces (animales, vegetales, minerales o incorpóreas como la fecha) entablan un debate, tan ardiente como intrascendente, y luego pone a trabajar otras cuatro coplas, analizando lo que acabamos de oír o hilando variaciones sobre su tenso drama absurdo. A la vez coloquial y sublime, formalmente riguroso y lleno de sorpresas, The Other Poems abre nuevos caminos para la lírica.»

— Marjorie Perloff

«A Samuel Beckett le encantaría Paul Legault. Ambos saben que cuando el absurdo se da la mano con los personajes en el escenario (o en la página), sobreviene el patetismo. Estos poemas son brillantes gemas de invención y emoción ligera. Y muy divertidos. Me encantan. De verdad.»

— Mary Jo Bang

«Con Los otros poemas, Paul Legault ha producido una brillante secuencia de sonetos que recuerda tanto al vertiginoso cine de Busby Berkeley como a los inagotablemente inventivos artilugios retóricos de Shakespeare o Sidney. Reuniendo a un elenco de cientos de personajes tan dispares como Sartre, Dolly Parton, La sillita bajo el agua, Québec, Caliban y Mujeres con el pelo largo de forma poco convencional, Legault ha puesto en escena una espectacular forma de comedia existencial de sketches que, a pesar de su crudeza, se muestra sorprendentemente decidida a “explorar la alegría y sus complejidades”. Incluso cuando sus personajes sueltan bromas como “La dualidad del progreso nos disuadirá, / pero ¿de qué exactamente?” o anuncian, con taedium vitae de cine de arte y ensayo, “Voy a ver una película para una clase. / El objetivo último de Los otros poemas es la búsqueda de su propia felicidad -una felicidad construida con extraordinaria inventiva, espíritu, ingenio y concentración- y mostrar, con el ejemplo, cómo cada uno de nosotros puede disfrutar de las luces Klieg de su propia creación.»

— Timothy Donnelly